miércoles, 18 de septiembre de 2013

Haciendo balance...

Llevó más de un mes de ruptura. Y creo que es momento de haber balance de cómo me ha ido este tiempo.

Los momentos de agobio y desesperación han dado paso a una especie de calma tensa, no sé cómo explicarlo. No estoy desesperada como hace tiempo atrás, en el que tenía a mi ex pareja agobiada con llamadas y mensajes, desde que he iniciado el contacto 0 estoy más tranquila.
Pero tenga la tension propia de quien sabe que tiene mucho por resolver.

La limpieza?: casi terminada. Ya he cerrado una caja, y estoy cerrando la última. Asique esta semana terminaré.

Aunque aun le sigo echando mucho, mucho, mucho de menos. Siento su ausencia, y el vacío tan enorme que me ha dejado, eso no he sido capaz de superarlo por el momento...

Ahora viene una fase importante para mí: la creación de nuevos hábitos, debemos ocupar nuestro tiempo y nuestra mente con nueva actividades que nos llenen y nos reconforten, y en eso estoy...

martes, 17 de septiembre de 2013

Miedo al compromiso

He vivido esta situación en un par de ocasiones, y amigas mías también...

Podría parecer que los hombres le tienen más fobia al compromiso que las mujeres, sin embargo, en los últimos años, se está dando vuelta la tortilla.

El miedo al compromiso se produce por una inseguridad. Esto está claro.

Realmente, poco podemos hacer aquí con esto, ya que el encontrarle o no una solución depende de la otra persona y no de nosotros mismos.

La persona que tiene miedo al compromiso, utilizará todo tipo de excusas para no darte un lugar en su vida, sin embargo, te llamará o te enviará mensajes para verte o saber de ti... Cómo se explica esto entonces??... A
Sencillo. A esa persona le gustas, pero siempre y cuando tu presencia no ocupe demasiado espacio en su vida diaria... No quiere verse pegado a ti en ningún caso, por miedo al compromiso o porque tiene miedo a que le hagan daño. El motivo es lo de menos.

Quien sufre de miedo al compromiso verá cualquier acercamiento por nuestra parte como una amenaza a perder su libertad, su espacio, su intimidad... No importa si el compromiso que estamos pidiéndole es grande o pequeño, él o ella lo verá como algo inmenso e imposible de cumplir.

Sencillamente no podrá. Y se alejará de nosotros a la minima amenaza.
Con personas así, mejor es alejarse uno mismo por propia voluntad. No podemos cargar con personas inseguras o que no saben lo que quieren.
A la larga este tipo de personas serán un lastre para nosotros, y sentiremos que siempre tiramos del carro nosotros solos... es decir, la pareja dejará de estar formada por dos para ser uno solo...

La frustración, la decepción y el enfado por la situación no tardarán en llegar. Lo mejor en estos casos es dejar que esa persona se marche: simplemente porque no nos da un lugar en su vida, no es buena para nosotros...

lunes, 9 de septiembre de 2013

Los celos...

Otro motivo muy común en una ruptura: los celos.

Los celos pueden venir principalmente por dos situaciones:

- Falta de seguridad en uno mismo.

- O nuestra ex pareja nos da motivos para ello.

En el primer caso, dependerá exclusivamente de nosotros.
En este sentido, los celos aparecerán en respuesta a intentar proteger lo que queremos, o mejor dicho, por miedo a perder lo que más queremos. Cuando percibamos que lo que nos importa está en peligro de ser arrebatado, nuestra reacción serán los celos.
De algún modo, la inseguridad en nosotros mismos hace acto de presencia aquí.

Es frecuente que aparezcan los celos con parejas, amigos, familiares, pero también en relación a nuestro trabajo o actividades cotidianas.
No hay que darle mayor importancia a pequeños episodios de celos. Son normales.
Pero cuando la cosa se vuelve patalógica... amigo, aquí hay problemas...

Muchas personas, se autodefinen así mismas como celosas. Sin embargo, no hacen nada por mejorar esta situación.
Superar los celos dependerá mucho de nosotros mismos, y en algunos casos, necesitaremos ayuda de un profesional.

Lo que no es lógico es acosar a nuestra pareja con celos tontos. Terminaremos por agotarla, cansarla y alejarla de nosotros. Además que alimentaremos las mentiras y que la pareja oculta información con tal de no vernos enfadados.
Como saber si los celos que sentimos son ciertos o todo forma parte de nuestra imaginación?: en un momento de celos, es complicado diferenciar una cosa de la otra.
Mi consejo es pensar antes de reaccionar. Antes de montar un buen pollo, pensemos si lo que realmente estamos viendo es real o estamos haciéndolo más grande de lo que realmente es.
Si es necesario, se puede pedir el consejo de un amigo neutral.

Estoy segura que si hacemos este ejercicio, la relación con nuestra pareja mejorará en este sentido: habrá más comunicación, más confianza y complicidad.
Nuestra pareja no tendrá miedo en contarnos lo que hace cuando no está con nosotros.


Por otro lado, tenemos los celos con fundamento. Es decir, aquellos que nuestra pareja alimenta dando pistas que está con otra persona.
En este caso, nuevamente, antes de reaccionar, debemos investigar si realmente está teniendo un affair o no.
Si reaccionamos con ira ante una sospecha sin pruebas, jamás tendremos la ocasión de saber si realmente está sucediendo o no.

Cuando pedimos más de lo que pueden darnos...

Otro motivo de ruptura.

No dejamos de exigirle a nuestra pareja una relación más seria, que nos llame o nos vea más, que cambie su manera de ser... y un largo etcétera.

Por supuesto que tenemos todo el derecho del mundo a hablar o a manifestar nuestro malestar ante algo que no nos guste.
Pero cuando la relación se convierte en una queja constante, evidentemente, esta situación agota a cuaquiera.

Por qué nos volvemos tan exigentes?, esto suele suceder porque en realidad, hemos elegido a alguien que no nos gusta. Y queremos que cambie para que se asemeje a nuestras necesidades y preferencias.

Esto además de ser cruel con nuestra pareja, es agotador e injusto.
Tenemos que mentalizarnos que nuestra pareja tiene defectos y virtudes, y en nosotros mismos está la capacidad de poder aceptarlos.
Nadie es perfecto, por lo que hay que ser un poco más flexible.

Si tantas cosas te molestan de tu pareja, quizás deberías plantearte qué haces con ella...

jueves, 5 de septiembre de 2013

La dependencia emocional...

Sin duda alguna, encontraréis muchísima información en Internet sobre la dependencia emocional. Yo aportaré un pequeño granito de arena, como siempre, a través de mi propia experiencia.

Yo he sufrido dependencia emocional.
No en esta ruptura, pero si en otra anterior.
Tardé tiempo en darme cuenta de esto, una vez la relación se había roto.

No lo negaré, al principio es difícil y muy doloroso darse cuenta que uno está emocionalmente atado a otra persona que, en la mayoría de los casos, no es conveniente para nosotros.
Cuando uno asume que tiene dependencia emocional hacia otra persona se siente débil y poca cosa. Sin embargo, el haberlo detectado ya es mucho!, un gran avance!, lo único que tenemos que hacer es poner remedio...

Cuáles son los síntomas de la dependencia emocional?:

- Obsesión hacia la otra persona: aunque nos trate mal y aunque sabemos que no es buena para nosotros (empezando por el hecho irrefutable que no nos quiere, puesto que nos ha dejado), intentamos continuar con la relación a toda costa.
Sentimos que si la perdemos nosotros no somos nada, o que nuestra vida no tiene sentido.

- Nuestra felicidad, se centra en esa persona.

- Incapacidad para hacer planes, tener proyectos propios... todo gira en torno a la pareja.

Y todo esto viene de la mano con una baja autoestima nuestra.

Cómo superar una situación de dependencia emocional?: Una vez reconocido el problema, y teniendo en cuenta que esta situación no es nada beneficiosa para nosotros, se necesitará una enorme fuerza de voluntad.

Hay que reforzar el autoestima. Tenemos que ser capaces de hacer cosas por nosotros mismos, cosas que nos hagan sentir bien, que nos aporten una nueva manera de ver la realidad, la vida, y nuestras propias experiencias...
Por qué no haces ese curso que tantas ganas tenías de hacer?, por qué no amplias tu círculo de amistades?, y si te apuntas a una ONG?... No sé!, hay millones de cosas para hacer!, actividades que pueden aportarnos mucho, que pueden enriquecernos!.

Yo me encuentro ahora mismo trabajando en ello, no tanto por una dependencia emocional en esta ruptura, que como he comentado antes, no la tengo, pero si para mi bienestar emocional.
Estoy ampliando mi círculo de amistades, conociendo gente poco a poco, también estoy buscando un curso que siempre he querido hacer.

Quizás sea un buen momento para empezar una nueva vida, no?...

domingo, 1 de septiembre de 2013

Todo cambia...

Indicaba en un post anterior, que uno de los motivos por los cuales se deja de querer, es porque se ha producido un cambio en uno o ambos miembros de la pareja.

Para ilustrarlo mejor, utilizaré un ejemplo vivido por mí hace algunos años.

Yo tenía una relación a distancia desde hacía mucho tiempo, aunque los kilómetros que nos separaban no eran demasiados.

Por motivos laborales, esta persona se cambia de ciudad, y se va un poco más lejos. Allí comienza a experimentar nuevas sensaciones: se independiza de los padres, pasa de la vida estudiantil a la vida laboral, hace nuevos amigos, pasó de vivir en una pequeña ciudad a una muy grande, comparte piso con nueva gente... todos estos cambios que él estaba experimentando, no los estaba viviendo yo con él.

Yo seguía con mi misma vida de siempre, nada había cambiado, o no lo había hecho con la misma intensidad que la suya.
En pocas palabras: estábamos experimentando la vida por caminos separados.

Al principio, yo lo veía un poco raro, pero pensaba que era por todo lo que él estaba viviendo en aquellos momentos.
Sin embargo, con el tiempo, la brecha comenzó a hacerse cada vez más grande, hasta que fue imposible seguir avanzando por el mismo sendero juntos.
Cuando quise reaccionar, ya era demasiado tarde... él me dejó.

Ante esta situación, es muy complicado solucionar el problema, a no ser que se ataje desde el principio, cuando comienzan a percibirse los primeros síntomas de separación.
Pero es complicado verlo, porque ya se encargará nuestro inconsciente en autoengañarnos para que no suframos.

Cuando uno tiene pareja, y ésta está muy unida, las vivencias, experiencias y emociones se viven juntos...