Mostrando entradas con la etiqueta he roto con mi pareja. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta he roto con mi pareja. Mostrar todas las entradas

miércoles, 23 de octubre de 2013

Segundas partes...

Hablaba ayer de cuando nuestros ex aparecen después de un tiempo.

Hoy me gustaría hablar de cuando reaparecen para tener una segunda oportunidad.

Es difícil distinguir en un principio cuando el acercamiento se debe a un egoísmo o cuando en realidad quieren volver con nosotros.
Yo veo la diferencia en que en la primera, pasado un tiempo, desaparecen sin motivo aparente otra vez, y en el caso de la segunda, se vuelven más insistentes e intentan por todos los medios mantener la comunicación.

Pasado un tiempo, nos daremos cuenta que quieren volver porque nos lo harán saber sin tapujos.

Qué hacer ante esta situación?. Para empezar, es obvio que no estamos hablando de una discusión en la que se produjo un distanciamiento, estamos hablando de una ruptura en toda regla.

Es difícil, por no decir complicado, ponerse en una u otra postura: volver o no volver... esa es la cuestión!.

Supongo que dependerá de la situación, de cómo se produjo la ruptura, en qué momento del duelo nos encontremos... En ese sentido, la decision depende única y exclusivamente de nosotros.

Y seguramente te hagas esta pregunta: y por qué quiere volver ahora?. Bueno, depende de muchos factores y quizás en tu caso, no sea ninguno de los que enumere a continuación:

- Rompió la relación porque nos dijo que había conocido a otra persona. Probó con esta otra persona pero la cosa no funcionó o no era lo que él/ ella esperaba. Es mejor volver con lo ya conocido.
En este caso es complicado perdonar, o podrías estar con tu ex pareja sabiendo que ha estado con otra persona mientras tú no dejabas de llorar y de sufrir??...

- Está en un punto de su duelo en el que  no puede asumir la pérdida o ruptura, por lo que aún no sintiendo lo que tiene que sentir, o no habiendo resuelto lo que tiene que resolver, se deja llevar por el engaño de su inconsciente y decide volver para hacer más llevadero su duelo. En este caso, no dudes que volverá a dejarte, una vez haya resuelto el bache en el que se encuentra.

- Pese a que la relación no funcionó por "X" motivo, aun sigue sintiendo algo por ti y quiere volverlo a intentar. Está claro que si no se resuelve lo que provocó la ruptura ésta volverá a producirse...

Evidentemente la decision está en vuestras manos, pero pensad siempre en vosotros, que si queréis volver que sea por razones más que meditadas, y no por el miedo a afrontar un duelo, la soledad, o simplemente porque echais de menos tener a alguien a vuestor lado.

En mi caso personal, segundas partes nunca fueron buenas.
Esta ruptura con mi ex era nuestra segunda oportunidad. Ya habíamos roto a finales del año pasado, a mediados de este lo volvimos a intentar, y cuál fue el resultado?: volvió a dejarme pasados 2 meses...
A mí no me ha ido bien, y lo peor de todo fue que la que salió mal parada fui yo: mis ilusiones de una segunda oportunidad se desvanecieron, nadie se hizo cargo del daño ocasionado en la primera ruptura y siento que he vuelto al mismo punto de partida del año pasado: me dejó.

Aunque evidentemente, seguro que conocéis personas que les ha ido bien... De verdad, que el tema de las segundas partes es sumamente complicado, solo vosotros tenéis la respuesta...

lunes, 21 de octubre de 2013

Mi lucha interior...

Aunque sepamos la teoría, será difícil mantener la guardia en todo momento.

Sabemos que esa persona ya no es la misma de antes: no nos quiere, no siente lo mismo por nosotros, está con otra persona... o el motivo que os hayan dado para la ruptura. (Si es que la hay).

Sabemos que el contacto 0 será fundamental para nuestra recuperación: necesitamos ese tiempo de desenganche emocional para poder crear nuevos hábitos y aprender a vivir sin esa persona a nuestro lado.

Sin embargo, aunque la teoría parece fácil, será verdaderamente complicado llevarlo a la práctica. Por qué?, principalmente por un motivo: y es que en el fondo nos negaremos a aceptar que nos han dejado. Nuestro inconsciente nos dirá mañana, tarde y noche, que hay posibilidades de volver, aunque en el fondo, y racionalmente, sabemos que eso no es posible...

Qué ocurrirá en este caso?: pues que intentaremos por todos los medios saber de su vida, aun cuando sabemos que las consecuencias de ello serán terribles para nosotros.
Existen medios para enterarnos qué están haciendo: a través de amigos y conocidos, frecuentar lugares que sabemos que lo/la encontraremos...
Y ni que decir tiene si nuestro ex contacta con nosotros!!, tenemos el atragantamiento servido!!.

Es normal caer en estas tentaciones, pero no por ello debemos dejarnos caer en ellas!. Cuando tu inconsciente comience con sus diferentes "estrategias" de saber sobre la vida del otro, piensa en las consecuencias que eso tendrá en ti. Y pregúntate lo siguiente: realmente conseguiré algo?, qué pretendo obtener?, no estaré humillándome?, y si él/ella quisiera volver no me lo hubiera dicho ya abiertamente?, qué pasará si me entero de algo a lo que aún no estoy preparad@?...

Si tus ideas sobre recibir noticias suyas continua, y pese a plantearte estas preguntas tu insconciente te sigue engañando, existe la posibilidad de mantener tu mente ocupada con otras actividades que poco o nada tengan que ver con tu ex.
Ponte a ordenador un armario, da un vuelta, queda con un amigo. Pero no permitas que tu inconsciente te gane la batalla ni que tire por tierra el trabajo que tanto te ha costado conseguir!!.

Felicítate cuando hayas conseguido superar las tentaciones!. Háblate a ti mismo y di: "Un día que he conseguido no contactar con mi ex, un día más!!", "pese a que me está costando lo estoy consiguiendo, no me comunico con él/ ella", "estoy ganándole la batalla a mi inconsciente", "me estoy demostrando a mí mismo que pese a que mis sentimientos son fuertes, mi fuerza mental lo es aún más", "de esta salgo por mis h....", "Yo puedo".

Y cualquier frase que se os ocurra y que os anime!.
Y si ya habéis caído en la tentación de contactar, mi mejor consejo es no autoflajelarse: que tire la primera piedra quien no se haya equivocado, quien no haya sucumbido alguna vez a comerse un bombón o tableta de chocolate cuando sabe que no debe hacerlo...
Todos nos equivocamos, yo también me equivoqué y meti la pata en muchas ocasiones.

Aprovecha este error para tomar nota, para ver cuan frágil y vulnerable estás, para saber cuanta fuerza necesitas para afrontar las tentaciones de tu inconsciente, en definitiva: para saber que aún tienes muchas batallas que lidiar, la primera de ellas, luchar contra esos deseos irrefrenables de saber de tu ex, y que no será nada bueno para ti...

Esta batalla será una de las más duras, pero te aseguro que cuando consigas vencer, te sentirás tan fuerte y orgulloso de ti mismo, que el resto del camino de tu recuperación será mucho más asumible.

Nadie dijo que esto fuera fácil...

martes, 17 de septiembre de 2013

Miedo al compromiso

He vivido esta situación en un par de ocasiones, y amigas mías también...

Podría parecer que los hombres le tienen más fobia al compromiso que las mujeres, sin embargo, en los últimos años, se está dando vuelta la tortilla.

El miedo al compromiso se produce por una inseguridad. Esto está claro.

Realmente, poco podemos hacer aquí con esto, ya que el encontrarle o no una solución depende de la otra persona y no de nosotros mismos.

La persona que tiene miedo al compromiso, utilizará todo tipo de excusas para no darte un lugar en su vida, sin embargo, te llamará o te enviará mensajes para verte o saber de ti... Cómo se explica esto entonces??... A
Sencillo. A esa persona le gustas, pero siempre y cuando tu presencia no ocupe demasiado espacio en su vida diaria... No quiere verse pegado a ti en ningún caso, por miedo al compromiso o porque tiene miedo a que le hagan daño. El motivo es lo de menos.

Quien sufre de miedo al compromiso verá cualquier acercamiento por nuestra parte como una amenaza a perder su libertad, su espacio, su intimidad... No importa si el compromiso que estamos pidiéndole es grande o pequeño, él o ella lo verá como algo inmenso e imposible de cumplir.

Sencillamente no podrá. Y se alejará de nosotros a la minima amenaza.
Con personas así, mejor es alejarse uno mismo por propia voluntad. No podemos cargar con personas inseguras o que no saben lo que quieren.
A la larga este tipo de personas serán un lastre para nosotros, y sentiremos que siempre tiramos del carro nosotros solos... es decir, la pareja dejará de estar formada por dos para ser uno solo...

La frustración, la decepción y el enfado por la situación no tardarán en llegar. Lo mejor en estos casos es dejar que esa persona se marche: simplemente porque no nos da un lugar en su vida, no es buena para nosotros...

lunes, 9 de septiembre de 2013

Los celos...

Otro motivo muy común en una ruptura: los celos.

Los celos pueden venir principalmente por dos situaciones:

- Falta de seguridad en uno mismo.

- O nuestra ex pareja nos da motivos para ello.

En el primer caso, dependerá exclusivamente de nosotros.
En este sentido, los celos aparecerán en respuesta a intentar proteger lo que queremos, o mejor dicho, por miedo a perder lo que más queremos. Cuando percibamos que lo que nos importa está en peligro de ser arrebatado, nuestra reacción serán los celos.
De algún modo, la inseguridad en nosotros mismos hace acto de presencia aquí.

Es frecuente que aparezcan los celos con parejas, amigos, familiares, pero también en relación a nuestro trabajo o actividades cotidianas.
No hay que darle mayor importancia a pequeños episodios de celos. Son normales.
Pero cuando la cosa se vuelve patalógica... amigo, aquí hay problemas...

Muchas personas, se autodefinen así mismas como celosas. Sin embargo, no hacen nada por mejorar esta situación.
Superar los celos dependerá mucho de nosotros mismos, y en algunos casos, necesitaremos ayuda de un profesional.

Lo que no es lógico es acosar a nuestra pareja con celos tontos. Terminaremos por agotarla, cansarla y alejarla de nosotros. Además que alimentaremos las mentiras y que la pareja oculta información con tal de no vernos enfadados.
Como saber si los celos que sentimos son ciertos o todo forma parte de nuestra imaginación?: en un momento de celos, es complicado diferenciar una cosa de la otra.
Mi consejo es pensar antes de reaccionar. Antes de montar un buen pollo, pensemos si lo que realmente estamos viendo es real o estamos haciéndolo más grande de lo que realmente es.
Si es necesario, se puede pedir el consejo de un amigo neutral.

Estoy segura que si hacemos este ejercicio, la relación con nuestra pareja mejorará en este sentido: habrá más comunicación, más confianza y complicidad.
Nuestra pareja no tendrá miedo en contarnos lo que hace cuando no está con nosotros.


Por otro lado, tenemos los celos con fundamento. Es decir, aquellos que nuestra pareja alimenta dando pistas que está con otra persona.
En este caso, nuevamente, antes de reaccionar, debemos investigar si realmente está teniendo un affair o no.
Si reaccionamos con ira ante una sospecha sin pruebas, jamás tendremos la ocasión de saber si realmente está sucediendo o no.

Cuando pedimos más de lo que pueden darnos...

Otro motivo de ruptura.

No dejamos de exigirle a nuestra pareja una relación más seria, que nos llame o nos vea más, que cambie su manera de ser... y un largo etcétera.

Por supuesto que tenemos todo el derecho del mundo a hablar o a manifestar nuestro malestar ante algo que no nos guste.
Pero cuando la relación se convierte en una queja constante, evidentemente, esta situación agota a cuaquiera.

Por qué nos volvemos tan exigentes?, esto suele suceder porque en realidad, hemos elegido a alguien que no nos gusta. Y queremos que cambie para que se asemeje a nuestras necesidades y preferencias.

Esto además de ser cruel con nuestra pareja, es agotador e injusto.
Tenemos que mentalizarnos que nuestra pareja tiene defectos y virtudes, y en nosotros mismos está la capacidad de poder aceptarlos.
Nadie es perfecto, por lo que hay que ser un poco más flexible.

Si tantas cosas te molestan de tu pareja, quizás deberías plantearte qué haces con ella...

domingo, 1 de septiembre de 2013

Todo cambia...

Indicaba en un post anterior, que uno de los motivos por los cuales se deja de querer, es porque se ha producido un cambio en uno o ambos miembros de la pareja.

Para ilustrarlo mejor, utilizaré un ejemplo vivido por mí hace algunos años.

Yo tenía una relación a distancia desde hacía mucho tiempo, aunque los kilómetros que nos separaban no eran demasiados.

Por motivos laborales, esta persona se cambia de ciudad, y se va un poco más lejos. Allí comienza a experimentar nuevas sensaciones: se independiza de los padres, pasa de la vida estudiantil a la vida laboral, hace nuevos amigos, pasó de vivir en una pequeña ciudad a una muy grande, comparte piso con nueva gente... todos estos cambios que él estaba experimentando, no los estaba viviendo yo con él.

Yo seguía con mi misma vida de siempre, nada había cambiado, o no lo había hecho con la misma intensidad que la suya.
En pocas palabras: estábamos experimentando la vida por caminos separados.

Al principio, yo lo veía un poco raro, pero pensaba que era por todo lo que él estaba viviendo en aquellos momentos.
Sin embargo, con el tiempo, la brecha comenzó a hacerse cada vez más grande, hasta que fue imposible seguir avanzando por el mismo sendero juntos.
Cuando quise reaccionar, ya era demasiado tarde... él me dejó.

Ante esta situación, es muy complicado solucionar el problema, a no ser que se ataje desde el principio, cuando comienzan a percibirse los primeros síntomas de separación.
Pero es complicado verlo, porque ya se encargará nuestro inconsciente en autoengañarnos para que no suframos.

Cuando uno tiene pareja, y ésta está muy unida, las vivencias, experiencias y emociones se viven juntos...

viernes, 30 de agosto de 2013

Porqué me has dejado?... Parte II

Como indiqué en un post anterior, el principal motivo por el cual nos dejan suele ser porque han dejado de querernos, o por lo menos, ya no sienten lo mismo por nosotros.

Pero, por qué una persona de la noche a la mañana deja de amarnos?. Ay amigo!, esta es la gran cuestión!, porque si esto no hubiera sucedido, nuestra ex pareja aun seguiría a nuestro lado...

Por empezar, hay que desterrar ese mito que nuestra ahora ex pareja dejó de querernos de la noche a la mañana. Ya comenté en un post anterior, que esta es la sensación que nosotros tenemos, pero no es la realidad...
Él o ella, ya elaboró su duelo con anterioridad, o está pasándolo en el mismo momento que decide romper la relación. En una palabra: nos lleva tiempo de ventaja.

Pero cómo esta persona llegó a ese punto de dejar de querernos?. Existen infinidad de motivos que propician esta situación.
Como indiqué, yo no soy una experta en la materia, pero si puede decir lo siguiente al respecto:

- Se ha producido un cambio en uno o en ambos miembros de la pareja: Ya sea un cambio de situaciones vividas en la actualidad, de un proceso de madurez... que se está viviendo en solitario, es decir, la otra persona no lo vive o lo vive o siente de otra manera diferente.
Esto provoca que percibimos al otro de otro modo. Se produce como una distancia entre ambos, porque ninguno de los dos lo vive a la vez.

- La persona dejada se ha convertido en un dependiente emocional. O lo que es lo mismo: necesita de su pareja para poder sentirse plena y feliz.
A quién le gusta tener a su lado a alguien que se quiere poco, que no se valora y no tiene personalidad?... De ahí, que nuestra pareja decida romper la relación.
Esto suele suceder con bastante frecuencia.

- A nuestra ex pareja le hemos exigido más de lo que realmente puede dar: Todos tenemos un límite, y si a nuestra pareja no paramos de pedirle que cambie su forma de ser, o su manera de hacer las cosas... puede que ésta se haya cansado de nosotros.
No sera que hemos elegido a la persona equivocada y que no dejamos de pedirle que cambie a nuestro gusto?...

- Los celos: Otro motivo de ruptura muy común. Si no dejamos de acosar a nuestra pareja con celos tontos, ésta terminará por cansarse de nosotros.
Esta actitud nuestra demuestra falta de seguridad en nosotros mismos. Aunque también he conocido casos en las que la otra persona ha dado motivos más que suficientes como para despertar celos en el otro... Hablaré de ello.

- El miedo al compromiso o falta de madurez: Si bien una falta de compromiso por parte de nuestra pareja puede significar una falta de madurez o que no nos quiere lo suficiente como para avanzar en la relación, es igual de cierto que, una persona puede querer mucho a otra, pero tener tanto miedo a enamorarse, a perder su libertad... que terminará por romper la relación si se siente amenazada.
Este tipo de desenamoramiento es muy común en los hombres, pero últimamente se está dando mucho en mujeres...

Hablaré largo y tendido en los siguientes posts sobre esto.
Por cierto, dentro de poco haré un mes de mi ruptura... como pasa el tiempo...

jueves, 29 de agosto de 2013

Porqué me has dejado?... Parte I

Es el punto de inflexión que ha hecho que nuestras ahora ex parejas, no estén con nosotros.

Dividiré este post en varias partes, porque considero que es lo suficientemente importante porque para dedicarle un gran espacio.

Aunque  en el momento de dejarnos, nuestra ex pareja haya sido sincera con nosotros en relación a los motivos de la ruptura, puede que en muchos casos, no nos haya dicho toda la verdad: o bien porque no lo tiene claro o porque no quiere herirnos.
Pero también puede ocurrir, que nosotros nos neguemos a aceptar la realidad, y no queramos creernos lo que nos cuentan.

Si es cierto, que digan lo que nos digan, casi nunca les creeremos. Siempre sospecharemos que algo nos están ocultando. Lo malo de esto, es que en la mayor parte de los casos, no podremos demostrarlo, y le daremos una y mil vueltas al tema, sin llegar a ningún puerto fijo.

Para empezar: tenemos que tener claro que las relaciones están formadas por dos personas, y ambas son responsables, en mayor o menor medida, de la ruptura.

Es difícil señalar un único motivo que haya propiciado una ruptura, ya que se producen por diferentes causas, pero en casi todas ellas existe un denominador común: el dejar de querer.

Incluso, cuando nuestra ex pareja nos deja porque ha conocido a otra persona, en realidad, lo que ha ocurrido, es que nuestr@ ex primero dejó de querernos o por lo menos dejó de sentir lo mismo de antes, y después, dejó entrar a una nueva persona en su vida. Nunca es al revés.
Recordad cuando estabais enamorados, a qué no mirabais a otra persona que no fuera vuestra pareja?...

El dejar de querer explicaría la mayor parte de las rupturas, porque cuando uno ama de verdad, abre las puertas de su vida de par en par. Sin condiciones.
No se es infiel a la pareja, no se le miente, no se le pega, ni se le insulta, ni se le humilla.
Se tiene tiempo para dedicarle, se intenta agradar a la otra persona, se le da un lugar en nuestra vida, se comparten actividades con él o ella.
Todo esto es amar, y seguramente me estaré olvidando de un montón de otras posibilidades.

Por qué se deja de amar?, de eso hablaré en el próximo post, además de otros motivos para romper una relación.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Cómo estará él?...

Me lo pregunto a cada momento...
Es normal que no teniendo noticias suyas nos lo preguntemos...

Desconozco su situación actual por completo, pero si puedo asegurar que él, al igual que yo, habrá pasado o estará en pleno proceso de duelo.
De esto, no nos escapamos ninguno!. Es así...

Lo que no sé, es en qué momento de su duelo estará... Y después de esta frase, yo me pregunto: y cómo estoy yo?, qué planes tengo para salir de esta?, cuál está siendo mi actitud?... Lo que quiero decir con esto, es que nuestra ex pareja ya es una persona adulta, y al igual que nosotros, sabrá que medidas tomar para poder salir del bache.

De nosotros nos tenemos que ocupar nosotros, porque nadie más lo hará.
Cuando nos vengan esos pensamientos tan poco constructivos, tenemos que cambiar ese rumbo y mirar hacía nosotros mismos.
Muchas veces nos hacemos preguntas del tipo: "qué estará haciendo él en este mismo momento?", cuando en realidad esto no nos está aportando absolutamente nada a nuestra recuperación.

Es la única manera que tenemos de salir de esa espiral de preguntas absurdas sin sentido de las que no tenemos respuesta, y en muchos casos es mejor no tenerla...
Siempre, intentad dirigirlas hacia vosotros mismos... A ver si yo me aplico el cuento también...

martes, 27 de agosto de 2013

La montaña rusa...

Hace algunos años, cuando estaba pasando por otra ruptura sentimental, leí sobre el concepto de "montaña rusa", y honestamente, no creo que exista otra manera mejor de poder describirlo.

Así es como me siento: unos días bien, otros mal... Las subidas y bajadas de estado de ánimo aparecen y desaparecen sin motivo aparente, con la extraña sensación de no saber porqué se van y vienen.
En estas fechas me encuentro en la parte baja de esta montaña.

Yo tengo la teoría de que estamos pasando por las fases del duelo, y que nos estamos amoldando a ellas, por eso unos días bien, y otros mal...

Cuando estamos en la parte baja, creo que es necesario rodearnos de las personas que nos quieren, necesitamos que nos mimen, y sobre todo, buscar algo que nos ilusione y nos de fuerzas para continuar.
En este instante nos encontraremos muy débiles, y será muy complicado mantener la guardia en todo momento. Es precisamente en estos bajones, cuando se puede cometer el gran error de contactar con nuestro ex. Bajo ningún concepto se debe hacer.
Cuando os asalten estas dudas como a mí, recordad porque es fundamental mantener el contacto 0 con ellos... Volved a reflexionar sobre el daño que nos pueden causar, pensad solo en vosotros como estoy haciendo yo...

Yo no dejo de llorar. Me siento débil, triste, sin camino, sin saber muy bien por donde continuar... Tengo un desánimo general que no consigo superar, y aunque lucho para ponerme metas, tengo que hacer un verdadero esfuerzo para tan siquiera poder planteármelas.

No, no estoy bien. Y la cosa ha empeorado desde que hace unos días decidí borrarlo de mi lista de amigos de Facebook.
Me costó hacerlo, pero era mi obligación. No podia permitir que siguiera en mi vida sin estar...
Por lo menos me alegro de seguir con mi tarea de la limpieza y cambiando mis hábitos, aunque esto último está siendo una lucha verdaderamente titánica.

Cuando llegue el momento alto de la montaña rusa, significará que estoy cogiendo fuerzas para continuar con mi duelo. Me agarraré a él con uñas y dientes para superar con éxito la siguiente fase.
Y mi pregunta es: cuándo llegará?...

lunes, 26 de agosto de 2013

Cambiando hábitos...

Comenté en un post anterior que iba a hablar de cómo superar este mal bache por el que, al menos yo, estoy pasando...

Tuve que retrasar su publicación un día, debido a la "aparición" de mi ex este fin de semana, algo con lo que no contaba.


El ser humano es un animal de costumbres: trabajo, casa, gimnasio, amigos... todos, todos, sin excepción, tenemos una rutina.
Cuando tenemos pareja, también tenemos esos hábitos: llamarla, quedar con él o ella, planear vacaciones, fines de semana...
Es decir, esa persona ocupa un lugar en nuestra vida.

Qué pasa cuando esa persona ya no está con nosotros?, bueno, además de la razón evidente que la seguimos queriendo, tenemos necesidad de seguir con esos hábitos, con esa persona, pero como no está, sentimos la sensación de vacío, que nos falta algo, y además ese algo es muy importante.

Es importante, que cuando tengamos fuerzas, podamos cambiar esos hábitos, o lo que es lo mismo, llenar ese espacio que antes ocupaba nuestr@ ex con nuevas costumbres, y a poder ser, que éstas sean saludables para nosotros...

Tenemos que decirle a nuestra mente, que lo que habíamos antes ya no sirve, que ahora las circunstancias han cambiado y que debemos amoldarnos a ellas.
Una buena solución sería apuntarse al gimnasio, no solo ocupará nuestro tiempo sino que además es muy saludable.

Y qué tal si te apuntas a ese curso que hace tiempo que quieres hacer pero no te animabas?.
Hacer nuevas amistades, conocer nueva gente nos aportará un extra, qué cómo hacerlo?, bueno, en Internet existen multitud de actividades de todo tipo para hacer: senderismo, teatro, rutas en bicicleta... busca, busca, que seguro que encuentras algo que te gusta!.

Pero ojo!, no se trata de modificar nuestros hábitos de manera radical, como por ejemplo: "dejo mi trabajo y me voy del país".
Cuidado con esto!, porque habría que ver si realmente estamos preparados para asumir un cambio radical tan importante en nuestra vida.
El cambiar los hábitos no significa dejar de sufrir, solo significa que nos ayudará en nuestra recuperación.
Nada debe bloquear nuestro duelo, porque este es un proceso por el que hay que pasar, nos guste o no.

Sé que al principio cuesta salir de esta espiral de tristeza, no es fácil, pero debemos obligarnos, o corremos el riesgo de salir a tiempo y caer en una depresión.

Como buen comienzo sería hacer una lista con las cosas nuevas que os gustaría aportar a vuestra vida y convertirlas en nuevos hábitos, y después elegir las que más nos interesen y que sean buenas para nosotros.

Yo de momento tengo pensado apuntarme al gimnasio y hacer nuevas amistades, y vosotros?...

domingo, 25 de agosto de 2013

El contacto...

Después de tanto tiempo, hoy he tenido noticias suyas. Aunque no ha sido un contacto en toda regla. Y me explico.

Como aun estoy en mi etapa de hacer limpieza, aun no lo he borrado de Facebook.
Me cuesta mucho tomar la decisión de eliminarlo del todo de allí, porque eso significa tener que afrontar la despedida, y creo que aún no estoy preparada.

Como comenté en un post anterior, es necesario y muy importante hacer limpieza: borrarlo del Facebook, no tener a la vista recuerdos y regalos suyos, devolver sus pertenencias cuanto antes...
Y como aún no he finalizado mi limpieza, me ha sucedido que hoy he visto que ha escrito en su muro.

No ha sido nada importante lo que ha escrito, pero yo lo he visto allí. Ahora sé lo que estaba haciendo a determinada hora, dónde estaba... y eso, no es nada bueno para mí.
Me he pasado toda la tarde pensando en ello.

Es evidente que debo mantener mi contacto 0 como he hecho hasta ahora, ya que cualquier noticia que me llega de él me mueve por dentro y me hace daño.
Debo continuar con mi limpieza y eliminarlo inmediatamente de Facebook. Tal y como están las cosas, no tiene demasiado sentido seguir manteniédolo allí... 

Cómo es posible que una simple noticia suya me haya movido tanto?, bueno, teniendo en cuenta que estoy pasando por un momento de bajón importante, que parece que nada me sale bien y que hacer las cosas me cuesta el doble, es normal que haya sucedido esto, en una palabra: estoy muy sensible.

Justo en este momento es cuando más me tengo que proteger y mimarme.
Aunque pasé buena tarde pensando en lo que había leído en su perfil, decidí volver a mis planteamientos iniciales: "piensa en ti, céntrate en ti misma y no en lo que él hace". Si sigo dándole vueltas a lo que él hace, estaré retrasando mi recuperación, y eso no ayuda, nada, nada, nada...

viernes, 23 de agosto de 2013

Solo...

Me siento sola. Y además, como comenté en un post anterior, estoy triste.

Los que me rodean están cansados de escuchar siempre la misma historia.
Le damos vuelta de un lado, de otro, y vuelta a empezar, para llegar siempre a la misma conclusion irrefutable: es lo que hay, y no se puede hacer nada.

Los que nos quieren, nos escucharán en un principio, pero pasado un tiempo, estarán hartos del disco rayado!.

Sin embargo, la tristeza, la desesperanza, la negación, la frustración... seguirá con nosotros. Y necesitamos soltarla de alguna manera!.
Como no podremos descargarla en determinados momentos, una buena opción es escribir una carta como os comenté en un post anterior hace unos días.
Con esta carta podemos expresarnos libremente, sin el temor al que dirán, a las reacciones externas, diciendo cómo nos sentimos en cada instante. Y además, no aburriremos a nuestro entorno...

Cuando los que nos rodean estén cansados, os sentiréis solos. Muy solos. Como me está pasando a mí. Se abrirá un abismo que mezclará tristeza y soledad a partes iguales.
Algunas veces se tenderá a estar solo, ya que como nuestros familiares y amigos no están viviendo nuestro duelo, y ellos viven sus vidas ajenos a ello, nosotros nos sentiremos un poco aguafiestas al estar rodeados de tanta tristeza y soledad.

Me gustaría contaros lo que me sucedió con una amiga en una ruptura anterior.
Hacía una semana que mi ex pareja había decidido dejarme, después de muchos años de relación. Yo estaba totalmente destrozada.
Intenté apoyarme en la gente que me rodeaba, y la respuesta que recibí por parte de esta "amiga" fue: " cambia esa cara larga que tienes, debes pasar página ya!". Que te digan eso después de una semana de ruptura no es ningún consuelo, no ayuda, y era obvio que esta persona no entendía mi situación.
A partir de entonces, dejé de sentirla mi mejor amiga, simplemente porque cuando más la necesité, no estuvo conmigo.
Nos fuimos distanciando, hasta que la amistad se rompió definitivamente. Ahora mismo mantengo muy poco contacto con ella.

Asique aquella ruptura me sirvió para desenmascar a los verdaderos de los falsos amigos.

Qué hacer ante la soledad?, si estáis pasando por la misma situación que yo, hay que utilizarla como un empuje para salir del agujero donde estamos.
La soledad no elegida no es buena, y si además está acompañada de tristeza, se mezclan dos componentes muy explosivos y peligrosos.

En el próximo post hablaré del plan que tengo para salir de este bache, para que me ayude a seguir mi camino de recuperación...

jueves, 22 de agosto de 2013

Las noticias...

Como comenté en un post anterior, es importante, y yo diría que casi vital, no mantener ningun tipo de contacto con nuestro ex.

No está siendo mi situación actualmente, pero en una ruptura anterior, me salté esta regla de oro en repetidas ocasiones y el resultado que obtuve no fue nada positivo para mí. Es más, fue nefasto...

Como aprendí de aquella ruptura anterior, no quiero volver a repetirlo en esta. Asique, aunque me está costando, es una regla de oro que no me salto ni de broma...

Sin embargo, habrá situaciones en las que mantener el contacto 0 sera difícil, o imposible.
Este es el caso de si se tienen amigos comunes o si se comparte puesto de trabajo.
En la primera situación, sera más o menos fácil el poder controlarlo, ahora, en el segundo, agárrate que vienen curvas...

Si se comparten amigos, pídeles que no te cuenten cómo le va.
Incluso, si la ruptura se ha producido por una infelidad, y tu ex está con otr@, que no te lo cuenten!
Aléjate lo más que puedas de eso!, no sigas retroalimentando la información preguntando o averiguando más sobre su vida.
Y sabes por qué?, porque volvemos al punto de partida que comenté en un post anterior: si me preocupo más de la vida de mi ex, no me preocuparé de la mía, que en este momento es más importante que la suya para mí!.
Además, le daremos alas a nuestro inconsciente para que siga engañándonos con un posible regreso.

Por otro lado, enterarte de sus vidas te adelanto, será un paso atrás en nuestra recuperación: nos hará daño, sobre todo si le va bien, y nosotros estamos fatal.
En ese punto, tendremos la percepción de que nuestro ex tomó la decision correcta en el momento de dejarnos.

Si te enteras que le va mal, seguramente te alegres, porque achacarás su malestar a la ruptura. En realidad lo que está sucediendo es que te sentirás más querido, o que tu ex ahora piensa que ha perdido a una persona única e importante en su vida, es decir TÚ.
Sentirás que tu ex, efectivamente, se equivocó a la hora de tomar la decision de romper, y eso te hará grande e importante. En este sentido, lo que se oculta detrás de esto es una sed de venganza.

Si tienes que ver a tu ex a diario, porque  trabaja en la misma empresa o es un vecino por ejemplo, ay amigo!, esto si que es difícil.
En estos casos, llevar a rajatabla el contacto 0 es imposible.
Actualmente un familiar muy cercano está viviendo esta situación. Mi consejo?, que cuando se lo cruce lo salude educadamente y siga su camino. Que evite las situaciones de conversación en la que se intercambian vivencias, sentimientos... no será nada bueno para nosotros.

Si se comparte puesto de trabajo, y hay que tratar temas laborales comunes, que sea solo eso: tratar temas laborales.
En este sentido, hay que evitar que nuestro inconsciente vea en estas situaciones una posible reconciliación.
Hablaré en un próximo post de las segundas partes...

Nuestros ex han tomado un camino, ya han decidido. Nosotros, tenemos que trabajar para asumir esta situación y poder seguir nuestro camino nosotros también, como ya hicieron ellos...

miércoles, 21 de agosto de 2013

La tristeza...

Lo llevo notando desde hace unos días... Me siento triste y desanimada.
Si bien me sigo aferrando a la idea de que todo no ha acabado, que aún existe la remota posibilidad de poder arreglarlo, aun a sabiendas que esto no puede ser...

El hecho incontestable de que él no aparece, que no sé nada de él desde hace ya varias semanas, alimenta mis peores presagios: la relación está rota y no hay marcha atrás.
Y eso choca directamente con mi inconsciente: que sigue haciendo de las suyas para seguir engañándome y decirme lo contrario...


Como indiqué en un post anterior, estoy luchando contra el autoengaño, que no es nada beneficioso para mí.
Las consecuencias de esta lucha?: la enorme tristeza que siento.

Ahora si que lloro. Lloro mucho. Le extraño, siento su ausencia y su lejanía.
Recuerdo los momentos que pasamos juntos y ahora los veo como un pasado que no volverá a repetirse jamás...
No tengo ganas de nada: no quiero salir, no mantengo casi contacto con mis amigos...
Sólo me apetece estar sola.

Sé que de alguna manera esto es normal. La tristeza que siento forma parte del camino que inicié cuando mi ex pareja decidió no seguir a mi lado.
Pero no puedo dejar que esta tristeza se alargue demasiado en el tiempo.
Me dejaré sentir esta sensación, que aunque es desagradable, es necesaria. Pero cuando lo considere oportuno, tendré que ocupar este tiempo ocioso que tengo en algo que me aporte algo positivo.
Hablaré de ello en un próximo post.

Por qué no es bueno que ocupe ahora mismo mi tiempo con otras actividades para no sentir la tristeza que tengo?: Muy sencillo. Porque es demasiado pronto todavía y si me mantego ocupada en este mismo instante, no podré vivir esta etapa del duelo. Me la saltaré. Y ya dije lo que pasaba cuando nos saltábamos las etapas... que tarde o temprano las pagaremos.

Tendré que tener paciencia con esta situación. Sé de sobra que esto tiene fecha de caducidad... cuando me sienta con fuerzas ocuparé ese espacio que antes ocupaba mi ex, y que un buen día decidió dejar vacío...

lunes, 19 de agosto de 2013

Perdiendo las esperanzas...

Como comentaba en un post anterior, los cantos de sirena siguen dentro de mí.
Mi inconsciente me los lanza mañana, tarde y noche. Evidentemente, me estoy autoengañando. Estoy luchando contra ello, diciéndome a mí misma que la relación está acabada. Pero es difícil...

Cuándo dejaré de tener estos cantos de sirena?, pues cuando las esperanzas desaparezcan.
Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, pues de ser eso cierto, entonces será el comienzo de mi proceso de recuperación. Mientras tanto, tendré que seguir luchando contra esta dichosa negación que no me está dejando avanzar.

Noto que tengo la esperanza que me envíe un mensaje, un email, o una llamada telefónica en la que me dice de volverlo a intentar.
Pero viendo que han pasado algunas semanas en las que no sé nada de él, es más que evidente, o por lo menos poco probable, que vaya a aparecer a estas alturas.

Estoy pendiente del móvil, del email... todo el tiempo, con la estúpida esperanza de tener noticias suyas, y con ello, un hipotético regreso.
Sé que será cuestión de tiempo, cuando me dé cuenta que no hay marcha atrás. Que de verdad, no va a aparecer. Que no puedo esperar nada de él ya.

La negación se retroalimenta de la esperanza, y mientras ésta permanezca no seré capaz de superar esta fase.
Cuándo sucederá esto?: cuando la otra persona haya rehecho su vida con una nueva pareja que no sea yo. Cuando llegue ese momento, perderé las esperanzas de recuperarle, porque significará que mi ex ha pasado página y ya ha encontrado otra persona que ocupe lo que un día fue mi lugar.

Cuando nuestro ex ha rehecho su vida, ahí si amigos, la esperanza de recuperarle se esfumará...

Tengo que dejarle marchar, pero de momento siento que no puedo...

domingo, 18 de agosto de 2013

Todo me sale mal...

He tenido la enorme desgracia que mi ruptura se ha producido en plenas vacaciones de verano.
O lo que es lo mismo: me ha fastidiado los únicos días de descanso que tengo en el año.

Además de haberse producido la ruptura pocos días después de haber empezado mis vacaciones, han sucedido una serie de acontecimientos, a cada cual peor, que han hecho que no levante cabeza.

Ahora me encuentro que comienzo de vuelta a trabajar y mis vacaciones han sido un auténtico asco. Vamos, para olvidar!.

La semana pasada se sumó otro hecho que me ha obligado a romper con la racha de mala suerte que tenía. Asique me he marchado sola de vacaciones, unos 3 días, para descansar y desconectar un poco de todo. Pese a que no tenía pensado irme a ningún sitio, ya que no tengo dinero, he tenido que apañármelas para poder irme aunque sea unos días.

Cuando vivimos una situación de ruptura sentimental, como la mía, tenderemos a ver las cosas malas que nos sucedan, y a minimizar las buenas. No somos capaces de verlas.

En una ruptura anterior, me sucedió algo muy similar.
Cuando aquella separación se produjo, al mismo tiempo perdí mi trabajo, murió un familiar, mis padres se separaron, muchísimos problemas económicos... en fin, que no paraban de pasarme cosas malas.
Tiempo después, cuando todo aquello había pasado, me di cuenta que si bien era cierto que no paraban de ocurrirme situaciones negativas, también era igual de cierto que mi actitud de no ver las cosas buenas, aumentaba mi angustia y mi malestar.

No quiero que me vuelva a ocurrir esto otra vez en esta ruptura!. Cuando veo que me invaden los pensamientos negativos, el famoso "todo me sale mal", me esfuerzo en pensar en las cosas buenas que me han sucedido, aunque sean pequeñas, pero seguro que han sucedido...
A veces tengo que hacer un enorme esfuerzo para poder encontrarlas, e incluso, tengo que forzarlas, como el viaje que he hecho esta semana.

Este viaje no solo me ha ayudado a desconectar de todo esto, sino también a centrarme en mí misma. En ver, que mi vida no se ha detenido con la ruptura.
El viaje ha salido muy bien, ha sido breve, pero me lo he pasado muy bien. He conocido gente, con la que he compartido unas charlas muy interesantes. Vaya!, parece que acabo de encontrar algo bueno que me ha pasado...

martes, 13 de agosto de 2013

Todo me cuesta...

Cuando lo que debemos hacer va en contra de lo que sentimos, es normal que nos cueste.
Todo es forzado al principio. Lo hacemos porque debemos, pero en el fondo queremos hacer lo contrario.

Queremos llamarle, pero sabemos que nos saltaremos la regla número 1 en una ruptura: "el contacto 0".
Queremos saber qué es lo que piensa, lo que está haciendo justo en este mismo instante, pero sabemos que eso no será nada bueno para nosotros.

Sabemos que tenemos que hacer una limpieza material, pero no podemos. Todo cuesta demasiado...

Muchas veces nos saltaremos estas reglas, y le llamaremos o intentaremos provocar un encuentro con nuestro ex... y una vez más, seremos víctimas de los tentáculos seductores de nuestro inconsciente, que con su canto de sirena nos atraerá y nosotros, débiles aún, nos dejaremos seducir por él.
Así pues, le enviaremos ese mensaje tan romántico diciéndole cuanto lo extrañamos, o le compraremos un regalo para convencerle de que vuelva a nuestro lado.
Y lo haremos, sabiendo que no es nada bueno para nosotros.
Desgraciadamente, tarde o temprano descubriremos que, siendo los dejados, somos los peor parados en esta historia, los más débiles y quienes de alguna manera nos llevaremos la peor bofetada a nuestro error.

Yo no recrimino a nadie que caiga en los deseos de su inconsciente. Yo caí en una anterior ruptura una y otra vez. Por experiencia sé, que no sirve de nada echarme las culpas por lo mal que lo he hecho, porque eso no me ayudará en mi recuperación. En lugar de eso, prefiero recoger de mi error un aprendizaje. Entonces, aprendía que si me saltaba las reglas, tendría unas consecuencias y lo pagaba caro, muy caro.

Lo que estoy viviendo ahora mismo es una lucha constante entre mi inconsciente y mi razón. O lo que es lo mismo, entre lo que siento y lo que debo hacer.
Es una tensión que no cesa.
Me encantaría el poder llamarle y poder decirle algunas cosas que se me han quedado guardadas, que no he podido decirle.
Sin embargo, sé que esto no será nada positivo para mí. Y lo sé, por la experiencia de mi ruptura anterior...

Sé que tengo que hacer una limpieza, pero siendo honesta, aún no la he empezado. No puedo. No puedo hacerlo.

Hoy he reflexionado sobre ello, y prefiero decir: "Hoy no puedo hacerlo, quizás mañana si".
Necesito darme un tiempo para poder afrontar la fase de la limpieza de la que os hablaba en un post anterior.

Cuando veo que todo me cuesta, cuando veo que este túnel se está volviendo demasiado oscuro para mí, intento imaginarme dentro de unos meses, cuando esté en una fase más avanzada de mi recuperación, cuando vea que esto no me duele tanto...

Sé que hasta cuesta trabajo verse bien en un futuro. Pero como tengo la experiencia de mi ruptura anterior, sé que saldré adelante. Sólo tengo que poner de mi parte, aunque ahora cueste trabajo.
Cerrad los ojos e imaginaos dentro de unos meses, cuando esto ya no duela tanto, imaginaos un futuro mejor que este presente que estáis viviendo ahora mismo... seguro que os anima un poco más, como a mí...

lunes, 12 de agosto de 2013

Haciendo limpieza...

Seguramente, si llevábamos algun tiempo con nuestra pareja, tengamos regalos, recuerdos... que nos rodeen en nuestra casa.
Muchas personas, prefieren tirarlas, deshacerse de ellas. Yo soy más partidaria de meterlas en una caja y mantenerlas lejos de mi vista, por lo menos, por el momento.

Por que no recomiendo tirarlas?, muy sencillo. Porque cuando hayamos superado nuestra etapa de recuperación, nos hará ilusión releer esas cartas que un día nos escribieron, o mirar aquellas fotos en la que aparecíamos felices, o aquel collar tan bonito que nos regalaron en nuestro cumpleaños.
Si las tiramos, jamás podremos recuperarlas, y creedme, nos arrepentiremos de haberlo hecho.

Sin embargo, cuando haya pasado un tiempo, contemplaremos con ilusión lo que un día fue una bonita historia de amor.

Por qué debo hacer una limpieza de todos los regalos, recuerdos y fotos que tengo?, porque el verlos ahora mismo me hace mucho daño, y no me ayuda en absoluto en mi recuperación.
Por otro lado, porque es fundamental crear nuevos hábitos, de los que hablaré en un próximo post.

No es fácil el recoger todos sus objetos y tener que meterlos en una caja, porque eso significa que debemos asumir que la relación definitivamente se rompió. Seguramente necesitemos tiempo para poder hacerlo.
Hay que darse un tiempo para ello, pero tampoco hay que eternizarse: simplemente hay que hacerlo.

Qué pasa con aquellos objetos que son suyos y que nosotros tenemos?, hay que devolverlos lo antes posible, porque el quedarse con ellos alargará con un hipotética posibilidad de volver.
El problema es que para retornar esos objetos a su dueño, debemos quedar con él. Y eso no será bueno para nosotros.
Vamos a fantasear con un posible regreso, inconscientemente volveremos a engañarnos con un hipótetica reconquista. Que voy a hacer yo?, aunque suene frío y horrible, le enviaré sus cosas por correo. No quiero verle. No quiero estar cerca de él. No quiero sentirle cerca de mí. Si por el contrario se lo entrego en mano, correré el riesgo de una recaída que ahora mismo no me hace ningún bien.

Si esta persona tiene cosas nuestras, y las necesitamos o son importantes para nosotros, debemos pedírselas, preferiblemente por un sistema neutro que no dé pie a una posible vía de contacto que será fatal para nosotros, por ejemplo un email o un mensaje por el móvil.
Es aconsejable pedirle que nos envíen nuestras cosas por correo también.

Aunque suene duro es lo mejor, porque ahora únicamente tenemos que pensar en nosotros.

domingo, 11 de agosto de 2013

El autoengaño

Cuando las realidades nos duelen, ya está nuestro inconsciente para crearnos unas nuevas y diferentes que no nos hagan tanto daño. Es una manera de supervivencia. Y hasta cierto punto no está mal.
Pequeños autoengaños nos sirven para sobrellevar el día a día.

Pero qué pasa cuando nuestro inconsciente crea una realidad tan diferente a la verdadera que poco o nada tiene que ver?. Pues que tarde o temprano pagaremos las consecuencias. Tarde o temprano se destapará la verdad y nosotros seremos los únicos perjudicados.

El autoengaño es una de los síntomas que nos indican que la fase de la negación está llegando. Aunque aun no hayamos abandonado la fase anterior.

Cómo funciona el autoengaño?, pues aun sabiendo que la relación se ha terminado, y que la ruptura es una realidad, que no tiene marcha atrás, mi inconsciente me manda mensajes de esperanzas.
Me dice que quizás, él se arrepienta y quiera volver. Me tienta con frases tan bonitas como "lo nuestro tiene solución", "él en realidad me quiere y me extraña", "me llamará para decirme que quiere hablar conmigo y ver la posibilidad de arreglarlo"... y un largo etcétera a cada cual más cínico.

Estas frases, dentro del contexto en el que estoy, no tienen cabida. Conscientemente sé que lo nuestro no se va a arreglar. Y entonces por qué mi inconsciente me miente?, sencillamente porque aún no está preparado para asumir la cruda realidad: mi relación se acabó.

Es peligroso dejarse llevar por estas frases tentadoras. Pero a la vez, es tremendamente fácil caer en ellas, porque suenan a cantos de sirena en el medio de una enorme tempestad.
Tenemos que luchar contra ellas!.
Qué pasa si me dejo seducir por estos ecos?, pues que tardaremos más tiempo en asumir la realidad, y con ello, permaneceremos en la fase de la negación más tiempo del necesario.

Desde hace poco, estoy escuchando estos cantos de sirena dentro de mi cabeza, que me llaman a grito pelado para que acuda a su encuentro. Cómo lucho contra ello?, siempre que me invaden las ideas que os he comentado con anterioridad me digo a mí misma: "no, te estás autoengañando".
En seguida acuden a mí otras ideas diferentes, y nuevamente vuelvo a decirles lo mismo.

Como os comentaba antes, el problema de esto es que nuestro inconsciente aún no está preparado para asumir el palo. Tenemos que darle su tiempo, poco a poco, terminará por digerir la realidad.
Con la frase "no, me estoy autoengañando", lo que estamos haciendo es no retroalimentar el engaño, no hacerlo más grande o que perdure demasiado en el tiempo, porque si esto ocurre, cuando la verdad estalle y nuestro inconsciente se vea abrumado con lo que le toca digerir, nos estallará como un globo de harina en la cara.

Si esto no os funciona, intentad reflexionar objetivamente y con racioalidad los cantos de sirena que el inconsciente os envía. Veréis que no tiene razón y que os está autoengañando.
Por ejemplo, cuando mi inconsciente me dice que él me quiere y que volverá, yo le pregunto lo siguiente: "de verdad me quiere?, entonces, por qué me ha dejado?.
Si me responde "porque no lo tiene claro y está hecho un lío, pero él te quiere e intentará arreglarlo. Volverá...", le respondo: "nadie deja lo que quiere"...